Con el avance de las redes de comunicación, uno de los servicios que más auge ha tenido a nivel empresarial son las comunicaciones de voz sobre tecnología IP. También conocida como VoIP, su presencia durante los últimos años se ha visto incrementada, retirando de forma paulatina la telefonía analógica y equipos que en muchas ocasiones eran complejos de configurar.
Pero ¿Qué ocurre con esta tecnología en los hogares? Es cierto que todavía no posee un alto grado de implantación. Los operadores no lo ofrecen como un servicio llamativo, de ahí que pocos usuarios opten por esta opción. Solo aquellos usuarios con ciertas nociones técnicas se deciden a contratar el servicio o bien rechazarlo.
Tal y como podéis imaginar, al igual que posee un número importante de ventajas, también es cierto que podemos encontrar algunos inconvenientes.
A continuación, vamos a analizar cada uno de los problemas y bondades de esta tecnología, que poco a poco desplazará a la telefonía analógica, aunque aún haya que esperar un poco para que esto suceda.
Ventajas de la telefonía VoIP
Tal vez la principal ventaja, o tal vez la más fácil de decir en un primer momento es la calidad del servicio. Lo que es cierto es que por alguna extraña razón los usuarios asocian este servicio a líneas de fibra óptica. Los servicios VoIP no son exclusivos de esta tecnología, pero sí es cierto que es la ofrece mejores garantías para que la comunicación sea la adecuada. Esto no quiere decir que una línea xDSL no podamos disfrutar del servicio, pero es cierto que los factores que afectan a la comunicación son muchos más, aumentando la posibilidad de que aparezcan retardos en determinados momentos de la comunicación que escuchemos de forma entrecortada a la persona que se encuentra en el otro extremo.
Sin ir más lejos, podemos utilizar VoIP a través de nuestro Smartphone y tarifa de datos. WhatsApp, Skype, Viber son algunos ejemplos de servicios VoIp aplicados a dispositivos y redes móviles.
Pero no queremos desviarnos de la temática de este artículo: la telefonía VoIP.
Por lo tanto, hemos mencionado que la calidad del servicio aumenta. También se incrementa el número de servicios asociados a la línea. Además de los ya característicos, aparece en escena por ejemplo la posibilidad de mantener una conferencia, o la realización de videollamadas.
De cara a los operadores también existen ventajas. Gracias a la tecnología IP, el coste de mantenimiento se reduce y los periodos de configuración son inferiores con respecto a la tecnología analógica.
¿Cuáles son las desventajas?
Hemos comprobado que las ventajas son muchas. Sin embargo, resulta obvio que las desventajas se encuentran ahí.
Seguro que a más de uno ya se le ha venido a la cabeza la primera: ¿Qué sucede cuando se produce un corte eléctrico? La respuesta es muy sencilla: el servicio deja de funcionar. Es decir, mientras los terminales de telefonía analógica reciben la corriente a través de los hilos de cobre procedentes de la central, en el caso de la telefonía IP, necesita una alimentación que puede ser PoE o a través de un adaptador de corriente. En el caso de ser PoE, el router que suministra corriente debe estar encendido. En caso de corte eléctrico en una vivienda, a no ser que se posea un SAI, la telefonía VoIP dejará de funcionar.
Aunque ya lo hemos mencionado con anterioridad, la calidad de la línea es un factor limitante. Nos encontramos ante comunicaciones en tiempo real, de ahí que el margen en lo que se refiere s retrasos sea mínimo. Ruido en la línea, atenuación elevada o picos en la latencia afectarán de forma negativa a las comunicaciones. Por este motivo, se opta por la utilización de FTTH.
Tal y como se puede observar, las ventajas son importantes, y poco a poco se empezará a eliminar la telefonía analógica de los hogares, aunque para ello aún haya que esperar unos años.
Fuente | www.redeszone.net